La escena que apareció en la prensa a finales de noviembre parecía cinematográfica, pero, desgraciadamente, es real y muestra el accidente de coche que acabó con la vida del actor Paul Walker, que, irónicamente, actuó en las películas donde la alta velocidad era la fuerza impulsora.
Él murió en la tarde del último día 30, y 40 años después de que el Porsche Carrera GT que estaba con un amigo, Roger Rhodes, quien también murió, se estrelló contra un árbol y un poste de luz y explotar.
Aunque la causa del accidente sigue bajo investigación, parece que el exceso de velocidad contribuyó a lo peor, ya que el coche súper deportivo es capaz de alcanzar hasta 330 Km / h.
La velocidad corría en las venas del actor dentro y fuera telas.No cine, le gustaba hacer las escenas que incluían la velocidad y, por lo tanto, se dispensó el dobles, tomando para sí todos los riesgos. Irónicamente, él llegó a declarar: "Si un día la velocidad de matarme, sé que he muerto sonriendo."
Además, la velocidad protagonizado el actor incluso en la vida real terminó influir en los jóvenes de todo el mundo, y que, por desgracia, tuvieron el mismo destino cruel. Uno de ellos es el banco de sólo 19 años, Giovana Alves de Souza Dias, que estrelló su coche contra un pilar de un puente en el último día 25, durante la conducción a alta velocidad en la carretera Padre Manoel da Nóbrega, cerca de la ciudad de Itanagar, costera São Paulo. Justo antes de morir, ella tomó una foto del velocímetro hasta 170 km / h. Según amigos de la víctima, que ya había publicado las fotos en las redes sociales por encima del indicador de velocidad de su coche a velocidades muy superiores a las permitidas por la ley. El primo dijo que estaba velocidades joven amante. Un amor que era costoso.
Ironía del destino o la consecuencia de que eligió? Algunos dicen que la pérdida de la propia vida por el bien de que el amor es un signo de valentía, audacia y valentía, pero en realidad es la falta de sentido común y la prudencia.
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